Traté de recordar cuándo fue la última vez que la abracé, pero el recuerdo no fue claro; y es que cuando dejamos de ver a las personas, pensamos que algún día repetiremos las risas y los abrazos, pocas veces somos consientes que será el último. Este es un texto que nunca será leído por Laura, pero ustedes tendrán la oportunidad de conocerla o recordarla.

Cumpleaños de Laura. Foto compartida por Angie
Cumpleaños de Laura que celebramos 2018, Daniela, Salomé, Angie, Liceth, Laura. Foto de Fredis obsequiada por Angie.

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El último abrazo pudo ser antes de la celebración del cumpleaños. Me pidieron que hablara un rato con Laura mientras ellas llegaban con el pastel y unas bombas para sorprenderla. Ese día la abracé para felicitarla por su cumpleaños, pero también porque me estaba contando sus cosas.

Tal vez el último abrazo fue cuando me pidieron que revisara su trabajo de grado, llevaban varios días trasnochando y poniendo todo de sí para que saliera bien. Ese día me sentí muy orgullosa de ese grupo y los abracé uno por uno.

Luego llegó la pandemia y todo acabó. Algunas reacciones a las publicaciones que subía en redes sociales, emoticones y después el silencio.

Laura

Los profes que la tuvimos en clase, coincidíamos con muchos adjetivos para referirnos a ella y sobre todo a la manera en la que realizaba los trabajos: inteligente, exigente, perfeccionista, puntual, responsable, participativa, sensible, tierna, amorosa, buena estudiante, buena amiga, buena hermana, buena hija.

Recuerdo que en una clase les repartí papeles con el nombre de las localidades de Bogotá, como trabajo final debían hacer una crónica sobre algún tema tratado en la localidad que le correspondió. Fue un reto para muchos, lleno de miedo, pereza y para algunos de emoción. Para Laura, fue la oportunidad de preparar un viaje con su mamá y visitar Sumapaz, una localidad que jamás hubiera pisado, sino lo exigía en la clase. Muchos hicieron el trabajo como pudieron, pero ella, ella lo hizo maravilloso, narró su viaje con la emoción de compartir ese espacio natural y diferente con su mamá. Cuando me entregó el trabajo me dio las gracias por el ejercicio. Así era ella, veía lo positivo a las situaciones que otros hubieran tomado como una tortura.

Después de clases, pasaban: Salomé, Angie, Daniela, Laura, Fredis y Laura Camila a saludarme, a preguntar algo o a conversar sobre lo que les había pasado en alguna clase. Luego se iban y regresaban al siguiente día con sus sonrisas y sus comentarios sarcásticos. Laura los cuidaba, los regañaba, les exigía y ellos la querían tanto; alguna vez le dijeron que era la mamá del grupo, y yo veía en esas acciones liderazgo.

Fueron muchas conversaciones en la oficina que me asignaron como Coordinadora de estudiantes en la Sergio Arboleda. Fueron muchas conversaciones en las clases y después de ellas que me demostraban lo valiente que era, lo capaz de cumplir todo lo que se proponía, lo dulce y sincera cuando se despedía con un abrazo.

Salida de la clase 2018 Taller de narrativas periodísticas en USA Foto regalada por Juan Villamil
Salida de campo grupo Taller de Narrativas Periodísticas 2018. Foto cortesía de Juan Villamil.

¿Qué le pasó a Laura?

El pasado domingo 27 de julio el corazón de Laura dejó de latir. Una caída desde la ventana de la habitación del apartamento que estaba disfrutando hace dos meses, en el noveno piso. Discutía con su pareja. En el apartamento estaban unos compañeros del trabajo de Laura, amigos de la pareja, estaban bebiendo y aseguran que no vieron ni escucharon nada.

Un vecino llamó a la ambulancia y a la policía al ver el cuerpo caer. Encontraron a Laura con su abrigo puesto, su celular y su bolso, con signos vitales. Al llegar al hospital ya había perdido la vida.

La pareja de Laura dijo que ella se había lanzado por la ventana, pero que no recordaba nada porque estaban muy tomados. Con estas declaraciones lo dejaron libre ese domingo. Al siguiente día se presentó acompañado de su papá, para hablar con el investigador del caso.

Doña Cecilia, la mamá de Laura, aseguró en todos los medios que han estado pendientes de este caso, que la relación era violenta. Su pareja la maltrataba física y psicológicamente. Estaban en terapia de pareja y el viernes, Laura le había dicho que iba a terminar con la relación. No solo se lo contó a la mamá, también a su mejor amiga, Salomé, con quien trabajaba en una empresa de publicidad.

Todas esperamos que la verdad se sepa. Pedimos una investigación exhaustiva y rápida. Pedimos justicia para Laura”. Estas fueron las frases que se escuchaban en el velorio de Laura.

Velorio Laura Blanco 29 de julio 2025

El último adiós

Ayer acompañé a la familia de Laura. La música, las lágrimas, el dolor, las flores y dos fotos de Laura fue la atmosfera que tuve toda la tarde. Las palabras de la mamá y del papá, un primo, una prima con quien compartió momentos lindos en la infancia que estuvo conectada por video llamada desde Alemania y un tío, agradeciendo la presencia y recordando lo poco que podemos compartir con las personas que amamos por culpa de la rutina. Pero las palabras que leyó otra prima, me parecieron que describían muy bien a Laura, ella se refería a las “primas Osorio” como mujeres fuertes, independientes, luchadoras, dispuestas a cumplir sus sueños y sus metas sin lastimar a nadie, solidarias y estas mujeres harán lo posible porque se haga justicia.

Estuve hablando con algunos del grupo del 2018, hoy egresados y egresadas exitosas. Me enviaron algunas fotos que tenían de la salida pedagógica, recordamos ejercicios de escritura que les pedí en clase y por supuesto hablamos de Laura, de lo mucho que la extrañamos, de lo triste de la situación y de lo increíble que estas cosas sucedan.

Algunos docentes, no solo tenemos que preparar buenas clases y estar actualizados para que nuestros estudiantes apliquen lo que se habla en una aula de clases, también nuestro rol es estar para escucharlos, aconsejarlos, guiarlos y en mi caso, acompañarlos en lo que más pueda.

La experiencia que tuve como coordinadora de estudiantes, pero también como docente, me llevó a conocer a Laura y a muchos más jóvenes con ilusiones, con metas por cumplir, esos que siempre requieren de una mano amiga que los escuche, los acompañe, esos que de vez en cuando necesitan de un abrazo.

A la mamá, el papá y el hermano de Laura, a toda su familia, a sus amigos, a sus amigas y a las personas que la conocieron y apreciaron, espero que llegue la verdad para que no sigan con esta incertidumbre, que es más detestable que el dolor.

¡Este dolor no sé cómo se acaba, pero saber la verdad nos da tranquilidad!

#justiciaparalaura

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