Siempre asocié caminar tomados de la mano con la muestra de una relación sólida. Siempre vi a mi abuela tomar de la mano a mi abuelo o a mi mamá tomar de la mano a mi papá, por qué pensar que sería distinta mi historia.

La historia nos cuenta que tomarse de la mano tienen diferentes significados, por ejemplo, en el Antiguo Egipto, se representaba a los esposos tomados de la mano en inscripciones y jeroglíficos, como símbolo de unión eterna en la vida y en la muerte. En la antigua Roma, estrechar las manos no solo era un saludo, sino también un acto de compromiso en los matrimonios.
En la Edad Media, cuando las demostraciones públicas de afecto eran restringidas en muchas sociedades europeas, tomarse de la mano era una de las pocas formas aceptadas de expresar cariño en público. En algunas culturas asiáticas, el gesto no siempre fue común en lo romántico, pero con la globalización y la influencia occidental, se convirtió en una muestra de afecto más frecuente.
Desde un punto de vista biológico y psicológico, tomarse de la mano activa receptores en la piel que envían señales al cerebro, promoviendo la liberación de oxitocina, la “hormona del amor”. Esto refuerza los lazos emocionales y reduce el estrés. Estudios han demostrado que las parejas que se toman de la mano con frecuencia tienden a sentirse más seguras y conectadas emocionalmente.
En el cine, la literatura y la música, tomarse de la mano ha sido un símbolo de amor puro e inocente. Canciones como I Want to Hold Your Hand de The Beatles, reflejan la emoción y la intimidad que conlleva este gesto. En películas y novelas románticas, el momento en que dos personajes entrelazan sus manos suele marcar un punto clave en su relación.
Siento que la canción Sigamos Caminando de Don Tetto, especialmente esta estrofa:
“Nunca lejos me iré a tu lado siempre estaré
Aunque todo ande mal, mi mano puedes sujetar
Créeme que también tengo miedo a no saber
Lo que puede pasar, lo que la vida nos dará”
tiene que ver un poco con lo que se dice de la importancia de que una pareja se tome de las manos, es un símbolo de apoyo.
Hace unos días me dediqué a ver parejas caminar juntas, y casi que la mayoría no estaban tomadas de las manos y esto me generó mucha curiosidad. Hoy en día, tomarse de la mano sigue siendo una expresión universal de amor y protección. Desde parejas jóvenes hasta ancianos que caminan juntos, este gesto sencillo comunica un vínculo profundo sin necesidad de palabras. También puede expresar apoyo en momentos difíciles, mostrar orgullo por la relación o simplemente disfrutar la presencia del otro.
Pero el solo hecho de que este caminando a tu lado, compartiendo un momento, es una muestra suficiente de que en la pareja existe apoyo, orgullo en la relación, porque si están juntos, viajando o caminando en su ciudad o su barrio, o su pueblo, es suficiente para decir que disfrutan de su compañía.
Yo disfruto caminar tomada de la mano con mi pareja, pero esto no quiere decir que los que no se tomen de la mano, no estén disfrutando de su compañía.
¡Nos estamos leyendo!